SODA STEREO 20 años después
Verano del hemisferio sur 1986-1987. Probablemente Diciembre de 1986. Metallica acababa de sacar el majestuoso disco Master of Puppets. Cliff Barton moriría incomprensiblemente en un accidente de autobús. El heavy metal está en un mal momento. Incluso el rock, en términos generales adolece de grandes íconos. Los grandes genios del Overdrive y del Metal Distortion están faltos de ideas. AC/DC, Iron Maiden, Judas Priest, incluso Metallica tedrá su primera caída con un disco mal producido como es el “...And Justice for All”. Las corrientes mas poperas del heavy campan a sus anchas. Aparece el SOFT METAL (vaya mierda de término) con exponentes como Def Leppard, Bon Jovi, Europe (como olvidar el The Final Countdown). Por el otro lado estaba el metal extremo, más cercano al punk, que es el trash metal y el death metal, con engendros como Slayer o Venom, como sus principales exponentes tempranos. Estos, a la postre, serán uno niños de pecho (teta) al lado de lo que sería el Satanic Metal escandinavo. Satánicos de verdad.
Dentro de este panorama incierto nos encontrábamos los hard rockeros y metaleros de toda la vida. Casacas (chupas) de cuero negras, parches de nuestros ídolos pegados en la ropa, melena rockera, y muchos discos y cassettes bajo el brazo. (Vaya desde aquí un saludo a los Tradicionales de Providencia, Rockshop, y los hermanos falaces. Qué tiempos aquellos). Nosotros defendíamos (y defendemos) el heavy metal y hard rock a brazo partido. Y mas en esa época.
Pues bien, fue en esa época asistí a una de las grandes fiestas en casa de mi familia Arias. Tios, primos y amigos. Todos allí.
Mi hermano Juan Andrés y yo éramos rockeros las 24 horas del día. Sólo nos gustaban otras músicas que no compitieran con el heavy. Música clásica, folklore andino, jazz. Incluso boleros y balses peruanos (vaya desde aquí otro saludo a Lucho Oliva y el Restorán del Club Chilote Peruano).
Pero el pop, y más aún, el mal llamado rock latino, era como un dardo en el pecho.
Nuestra querida y adorada prima Susana, 5 años menor que yo y 3 que mi hermano, era popera de corazón. Entre sus gustos figuraban, en esos tiempos, un tal George Michael que cantaba Footlose. Y por supuesto, la persiana americana de Soda Stereo.
Todavía me acuerdo de la discusión estúpida en que nos enfrascamos. Es cierto que Soda, en esa época, había sacado su disco homónimo, luego el "Nada Personal", y en esos días el "Signos", y que salvo el último, los primeros eran poco atractivos, musicalmente hablando. Pero ahora, con el paso de los años, puedo apreciar esos discos como los primeros pasos hacia una evolución musical alucinante.
Ahora creo que Susana, con su gusto popero, fue capaz de ver lo que nosotros no. Como buenos heavys, esa noche la hicimos llorar a mares, discutiendo acerca de la calidad musical de los tres clones de The Cure.
Tiempo después mi vida cambió. Soda sacó el Doble Vida (donde viene el que para mis es su cúspide creativa, "La ciudad de la Furia"), disco al que no le hice ni caso. Pero no fue hasta 1989, cuando, gracias al flaco Alejo Sanhueza, escuché "Canción Animal".
Ya desde el primer momento mi alma se transportó al escuchar esa fantástica canción en 7/4 que es "El séptimo día". Luego, como era LP, el lado B empezaba con "Música Ligera". Pedazo de canción. "Hombre al Agua", "Canción Animal", "Entre caníbales", "Te para tres", "Sale el Sol", "Sueles dejarme solo”, “Un millón de años luz”, son parte del Soundtrack de mi vida.
Luego vino el disco Dynamo con el que el amor fue completo. Como pasó mucho tiempo antes que sacaran su último disco en estudio, “Sueño Stereo”, me dio tiempo para escuchar todos sus discos anteriores.
Desde luego sigo pensando que los dos primeros no son precisamente disco de una ejecución musical impecable (como si son todos desde el “Signos” en adelante). Sin embargo desde el punto de vista de la esencia del Pop Rock, son discos notables, fuera de serie.
En primer lugar, porque Gustavo Cerati es un escritor de letras excepcional. Son incontables las frases que se pueden sacar se sus canciones con contenido que va mucho mas allá de la típica canción pop. Y en estos 2 primeros discos hay muchas. “…Alguien me ha dicho que la soledad se esconde tras tus ojos…”,”…Ella ya se ha ido, un hueco en mi habitación, Sus manos siguen frías, He perdido , la fascinación, Sus rasgos son escombros…”, “…Hay anarquía en mis movimientos y al mismo tiempoAlguien los controla…”, etc.
Por otro lado, si bien la estructura de las canciones es la típica POP, las armonías ya eran un poco mas complejas que las poperas de toda la vida. Posteriormente fueron muy complejas.
En fin, que por todo lo anterior, desde esta tribuna, pido perdón a mi prima Susana por lo que le hice sufrir en esa oportunidad. Y estoy seguro que mi hermano Juan piensa lo mismo.
Dentro de este panorama incierto nos encontrábamos los hard rockeros y metaleros de toda la vida. Casacas (chupas) de cuero negras, parches de nuestros ídolos pegados en la ropa, melena rockera, y muchos discos y cassettes bajo el brazo. (Vaya desde aquí un saludo a los Tradicionales de Providencia, Rockshop, y los hermanos falaces. Qué tiempos aquellos). Nosotros defendíamos (y defendemos) el heavy metal y hard rock a brazo partido. Y mas en esa época.
Pues bien, fue en esa época asistí a una de las grandes fiestas en casa de mi familia Arias. Tios, primos y amigos. Todos allí.
Mi hermano Juan Andrés y yo éramos rockeros las 24 horas del día. Sólo nos gustaban otras músicas que no compitieran con el heavy. Música clásica, folklore andino, jazz. Incluso boleros y balses peruanos (vaya desde aquí otro saludo a Lucho Oliva y el Restorán del Club Chilote Peruano).
Pero el pop, y más aún, el mal llamado rock latino, era como un dardo en el pecho.
Nuestra querida y adorada prima Susana, 5 años menor que yo y 3 que mi hermano, era popera de corazón. Entre sus gustos figuraban, en esos tiempos, un tal George Michael que cantaba Footlose. Y por supuesto, la persiana americana de Soda Stereo.
Todavía me acuerdo de la discusión estúpida en que nos enfrascamos. Es cierto que Soda, en esa época, había sacado su disco homónimo, luego el "Nada Personal", y en esos días el "Signos", y que salvo el último, los primeros eran poco atractivos, musicalmente hablando. Pero ahora, con el paso de los años, puedo apreciar esos discos como los primeros pasos hacia una evolución musical alucinante.
Ahora creo que Susana, con su gusto popero, fue capaz de ver lo que nosotros no. Como buenos heavys, esa noche la hicimos llorar a mares, discutiendo acerca de la calidad musical de los tres clones de The Cure.
Tiempo después mi vida cambió. Soda sacó el Doble Vida (donde viene el que para mis es su cúspide creativa, "La ciudad de la Furia"), disco al que no le hice ni caso. Pero no fue hasta 1989, cuando, gracias al flaco Alejo Sanhueza, escuché "Canción Animal".
Ya desde el primer momento mi alma se transportó al escuchar esa fantástica canción en 7/4 que es "El séptimo día". Luego, como era LP, el lado B empezaba con "Música Ligera". Pedazo de canción. "Hombre al Agua", "Canción Animal", "Entre caníbales", "Te para tres", "Sale el Sol", "Sueles dejarme solo”, “Un millón de años luz”, son parte del Soundtrack de mi vida.
Luego vino el disco Dynamo con el que el amor fue completo. Como pasó mucho tiempo antes que sacaran su último disco en estudio, “Sueño Stereo”, me dio tiempo para escuchar todos sus discos anteriores.
Desde luego sigo pensando que los dos primeros no son precisamente disco de una ejecución musical impecable (como si son todos desde el “Signos” en adelante). Sin embargo desde el punto de vista de la esencia del Pop Rock, son discos notables, fuera de serie.
En primer lugar, porque Gustavo Cerati es un escritor de letras excepcional. Son incontables las frases que se pueden sacar se sus canciones con contenido que va mucho mas allá de la típica canción pop. Y en estos 2 primeros discos hay muchas. “…Alguien me ha dicho que la soledad se esconde tras tus ojos…”,”…Ella ya se ha ido, un hueco en mi habitación, Sus manos siguen frías, He perdido , la fascinación, Sus rasgos son escombros…”, “…Hay anarquía en mis movimientos y al mismo tiempoAlguien los controla…”, etc.
Por otro lado, si bien la estructura de las canciones es la típica POP, las armonías ya eran un poco mas complejas que las poperas de toda la vida. Posteriormente fueron muy complejas.
En fin, que por todo lo anterior, desde esta tribuna, pido perdón a mi prima Susana por lo que le hice sufrir en esa oportunidad. Y estoy seguro que mi hermano Juan piensa lo mismo.
NOS VEMOS EN EL CONCIERTO DEL 24 DE OCTUBRE. YO VOY ESTAR EN TRIBUNA ANDES. (Desde aquí un saludo a mi amigo Ramón Granada, por facilitarme el ticket del concierto)
Las tazas sobre el mantel
la lluvia derramada...
un poco de miel
un poco de miel
no basta
El eclipse no fue parcial
y cegó nuestras miradas
te vi que llorabas
te vi que llorabas
por él
Te para tres
Un sorbo de distracción
buscando descifrarnos
no hay nada mejor
no hay nada mejor
que casa
Te para tres.
posted by Bethonius at
11:52 PM
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